Recuerdo aquel domingo....

mi Amo me me tenía agarrada de los pelos y me llevo a la bañera... Me mantenía erguida y me dirigía sin decirme ni una palabra.

Previamente me había desnudado, violentamente... me arrancó la blusa, me tiró sobre el sofá y me bajó los pantalones con fuerza. Mi cara de susto tenía que ser patente, porque cuando me arranco las bragas esbozó una sonrisa maquiavélica. Deslizó sus manos entre mis muslos para terminar con un leve roce en mi coño, que no hizo mas que me estremeciera con una mirada que le pedía mas...

-No zorra, no me pidas que no te voy a dar.... sabes q las perras no teneis derecho a pedir...-En ese momento me avergoncé... de que mi petición hubiera sido tan obvia.

Me agarró de los aros de mi sujetador, desplazándolo hacia arriba y dejando mis tetas al decubierto, y me hizo levantarme del sofá. Cuando me tuvo frente a EL me quitó el sujetador por la cabeza, sin desabrocharlo. Para cuando bajé los brazos ya me tenía de los pelos llevándome hacia la bañera. La excitación y el frío q sentía camino al baño... hicieron que mis pezones se pusieran duros como piedras.

Nada más llegar al baño, el olor a gel me absorvió.... y el agua calentita que llenaba la bañera empapó todos y cada uno de mis recovecos, escondiendo el olor a mi coño que ya empezaba a hacerse notar. Según me acomodé, cogí la esponja para lavarme y mi Amo me agarró de las manos y las volvió a meter bajo el agua.

-Hoy te quiero bien limpia zorrita, déjame a mi...- dijo cogiendo la esponja y empezando a frotarme la espalda. Yo ya sabía lo que quería decir con quererme bien limpia, me había advertido. En ese momento me estremecí, sólo podía mirar el agua de la bañera y su mano mientras me lavaba. Su mano me frotaba el cuerpo con suavidad y ternura... echándome agua con la esponja empapada por la espalda... Me agarró de la mano y me ayudó a incorporarme para luego ponerme a 4 patitas en la bañera... sabía lo que quería limpiar... :s

Primero cogió la esponja y me frotó las nalgas a conciencia. Sentía como la esponja recorría mi raja de principio a fin. Yo no podía ni levantar la cabeza de la vergüenza que me daba sentir a mi Amo en mis recovecos inexplorados. Estuvo unos segundos que ni me tocaba... eso era algo que me hacía estremecerme, imaginaba lo que hacía... y en ese momento sentí sus dedos alrededor de mi ano, con algun líquido espeso que pronto deduje que sería jabón. Le sentía masajear mi cueva inexplorada, asomandose a ella un poquito con uno de sus dedos. Yo sabía (y sé....) que mi Amo nunca jamás me haría daño por lo que me dejaba hacer... sin levantar mi mirada del la espuma que se mecía sobre el agua. Mientras, mi Amo iba adentrandose cada vez mas en mi cueva oscura con un dedo lleno de jabón.

-Tranquila mi niña, sólo es que te quiero disfrutar limpita- Eso me obligó a mirarle para sonreirle y encontrarle atento asegurando mi higiene hizo que me avergonzara aún mas...

Cuando me creyó suficientemente limpia... cogió el teléfono de la ducha y me empezo a aclarar... en la postura que me había dejado. Me ayudó a incorporarme y me sacó de la bañera... Tomó una toalla y me secó con suavidad... mientras me iba besando en diferentes zonas del cuerpo. cuando llegó a mis manos, después de secarlas me colocó unas muñequeras de cuero negras, una en cada mano.... Me secó la tripa, las tetas, el coño... y vistos mis reparos con mi parte trasera, volvió a concentrarse a secarlo bien, todo era bueno para ruborizarme.Y al llegar por mis piernas a mis pies, me puso otras tobilleras de cuero negro también.

Apenas me dirigía ninguna palabra, todo ese rato solo se oía mi respiración que variaba dependiendo de la zona en la que se concentraba mi Amo. Pero una vez puestas las muñequeras y tobilleras, sonaban continuamente los tintineos de los metales que chocaban entre si. Y así me dirigió hacia su dormitorio. Un dormitorio con una cama grande en medio que solo tenía la sabana bajera, blanca e impoluta, sin ninguna mínima arruga. De la mano me acostó boca abajo.... mientras se sentaba a mi lado a la altura de mi cara...

-Mi niña, ya sabes que conmigo nada te va a pasar... quiero que sigas confiando como hasta ahora... - me dijo mientras me enseñaba el antifaz negro de cuero que me iba a colocar.
Levanté mi cabeza para que pudiera rodearla con el antifaz... En cuanto me cegó... escuché "mi niña, abre la boca" y al abrirla sentí q me metia una bola en la boca... En ese mismo instante, ya me deje llevar y hacer a su gusto y satisfacción.

A partir de ahora, sólo se lo q sentí...

Tomó mi mano derecha y me la estiró... me la beso y la engancho a una cadena, el sonido era inconfundible.... hizo lo propio con mi mano izquierda y mis pies.... y allí me imagine, tumbada boca abajo abierta en X totalmente, para EL.

Para cuando me ató... senti que algo cálido resbalaba por mi mejilla... la mordaza que me había colocado provocaba que no puediera retener mi saliva y ya empezaba a mojar mi cara y la sábana que cubría el colchón... Mientras yo pensaba en ello sentí como acercaba un almohadón a mi y me pidió q levantara el culo, y yo lo hice dentro de la limitación de movimiento que tenía por las cadenas que me ataban... Y de esa manera me imaginé... atada, con el culo y el coño completamente expuestos para mi Amo, babeando.... solo de sentirme tan perra y ofrecida sentí como mi coño empezaba a empaparse, cosa que me avergonzaba... pero mi Amo lo palpó y supe que ya no podía ocultar lo cerda que me ponía. Entonces sentí sus pasos q se acercaban a la parte de mi cara y le escuché como me decía al oído:

-Me encantas así, perra y mojada por y para mi... mmmmmmm.... babeas... me encantas mi zorra

Eso me me hizo arder.

Sentí como se alejaba y movía algunas cosas... no sabría decir en aquel momento que era... pero se que situó algunas cosas a mi lado en la cama. Se sentó a mi lado y empezó a jugar con mi clitorix, que ya estaba hinchado de lo cachonda que me tenía. Sólo de tocarme empecé a retorcerme... y acto seguido dejé de sentir el contacto de su piel en mi.

Plasssss!!!!! Un ruido sordo y un paletazo en la parte baja de mi culo... me escoció el coño de golpe... El ímpetu del golpe me hizo desplazarme hacia delante y soltar un gemido sordo, que la mordaza aprisionaba. Plassss!!!! otro paletazo que atravesó el aire para chocar en mis nalgas.... buffff.... me estaba volviendo loka. Aquella mezcla de excitación y escozor, me estaban sacando de mis casillas. Así continuó durante 20 palazos.... y de golpe me metió el dedo en el coño.... Mi excitación iba in crescendo y mientras me masturbaba sólo oía el chapoteo de su mano en mi coño... Cuando me volvió a tener al límite vovió con la pala, que no hacía mas que hacerme gemir... mientras mordía la bola de la mordaza con fuerza. Esta vez fueron 30... reconozco que cada vez me dolía menos y me excitaba mas... Cuando paró yo esperaba que volviera a masturbarme el coño... pero esta vez no fue así.

Sentí su mano fría abriendome un poco las nalgas y posar un dedo sobre mi ano. Sentí como tenía el dedo empapado en lubricante y como introducía la punta otra vez...

-Trankila mi zorra, luego me pedirás más....

Sentí de nuevo la presión de su dedo que intentaba abrirse camino por mi inexplorada cueva... No se si me excitaba mas su dedo o el sentirme tan expuesta y el sentimiento de que pudiera hacer conmigo lo que quisiera, pero lo cierto es que mi coño no dejaba de emanar jugos. Cuando consiguió pasear su dedo por mi culo a su antojo... volvió al ataque... Al posar su mano sobre mi piel, sentí el calor q mis nalgas echaban. Me cayeron otros 20 palazos... mmmmmm... sólo de recordarlos.... Cuando dejó la pala sobre la cama... deslizó su dedo por todos mis bajos.... yo no sabía ya donde se iba a centrar... mi cuerpo se estremeció. Pero de golpe introdujo tres de sus dedos en mi coño, me sorprendió.... y no pude evitar gemir en ese mismo instante.... entonces me dio un cachetazo en el culo. Que susto me dio... "como te corras te arrepentiras, mi perra kotxina". Esas palabras dichas con una dulzura incomparable, fueron suficientes para empezar a evitar que el orgasmo que cada vez mas cerca estaba no se apoderara de mi.

No se entretuvo mucho tiempo esta vez.... mi Amo cogió la fusta (cosa que descubrí al primer fustazo que recibí), y comenzó a gozar dándome en el culo y en el coño con ella, aprovechando la largura de esta para poder acapararlo todo. Bufff.... es que sólo de pensarlo, siento que me mojo aquí y ahora frente al teclado. Me cayeron 20 fustazos, la verdad que se los debía, por previas regañinas que me había echado mi Amo. Mis nalgas me ardían... no quería imaginar las marcas que la fusta me habría dejado, ni las marcas de mis dientes en la bola de la mordaza.

Entonces mi Amo paró... y sentí que volvía a lubricarme la zona anal. Me introdujo un dedo de nuevo, pero esta vez se encontró la puerta abierta () .... detrás introdujo dos dedos y trabajándome un poco mas.... Yo no hacía mas que gemir... era tanta la excitación que mi respiración se entrecortaba. Cuando ya me hubo dilatado con los dos dedos... cogió un minivibrador que me había comprado y sin saber que forro le había puesto me lo introdujo poco a poco. Recuerdo esa sensación... pero no como una pesadilla... sino como algo placentero... mi mente no hacía mas que dar las gracias a mi Amo, con la mordaza era inútil intentarlo. Me encontraba babeando, atada, expuesta y usada... bufff.. comenzaba a ser demasiado para mi.

Cuando consiguió dilatarme lo suficiente para que el pequeño vibrador se deslizara con suavidad, mi nivel de excitación era tal, que empecé a sentir que hasta me mareaba.

Sentí que volvía a acercarse a mi... y me susurró:
- Zorrita, todavía no... pero trankila, pronto te dejaré correrte.

Me sacó el vibrador del culo en el momento justo, porque no sabía si podría aguantar mas.

Ya no razonaba, ya no oía... solo sentía y disfrutaba, cuando de repente el silbido del látigo resonó en mis timpanos. Un arañazo fuerte rasgó mis nalgas... cuando senti que una lágrima recorrió mis mejillas.... Ya tenía perdido el sentido, calculo que me dio otros 20 latigazos, pero no lo recuerdo, mi mente estaba nublada. Estaba completamente fuera de mi... y lo siguiente que sentí fue la polla de mi Amo llenandome el coño como si de un tsunami se tratara. Entre empujón y empujón cuando ya estaba a punto de dejarme llevar por completo sentí como mi Amo me llenaba el culo con el vibrador antes mencionado. Me sentí llena por todos lados... empecé a convulsionar... y sólo pude correrme... no tenía la capacidad de poder pedir permiso a mi Amo, y reconozco que fue el mejor orgasmo de mi vida... Mis gritos ahogados por la mordaza, y mi Amo se echó sobre mi y me mordió los hombros... con su polla dentro de mi, y su cuerpo empujando el vibrador que tenía en el culo, esos mordiscos no hicieron mas que volver a llevarme al orgasmo.

Me dejó correrme agusto, cosa que disfrute como la cerda que estaba siendo...

Cuando me soltó, me quitó el antifaz y la mordaza... me beso la boca babeada con pasión...

Me ató las dos muñequeras unidas a la espalda, se echó en la cama y abrió sus piernas:

-Te has portado, lo mereces, disfrútame....

Esas palabras fueron melodía para mis oídos.... sólo pude ponerme entre sus piernas y chupar, succionar y lamer con más agradecimiento y ganas de proporcionarle placer que nunca. Sus espasmos no tardaron en llegar... y yo... he de reconocer... que entre sus gritos y la presión que mis piernas hacían sobre mi coño... volví a correrme... pero eso queda ahí, como un secreto inconfesable, mi Amo no me había dado permiso.